lunes, 30 de septiembre de 2013

Ryanair: la compañía que ahora quiere ser amable con los pasajeros

La compañía aérea Ryanair, que habitualmente se caracteriza por no prestar atención a las necesidades de sus pasajeros, desestimando cuantas reclamaciones o quejas presentan, podría estar reconsiderando esta actitud ante el deterioro de su cuenta de resultados.

La rigidez de las políticas que aplica a sus clientes, y la falta de consideración para con las necesidades que estos le manifiestan parece que finalmente está haciendo mella en los resultados que viene obteniendo en los últimos tiempos, lo que ha desatado el nerviosismo de sus inversores que ven como potenciales clientes dan la espalda a la compañía, negándose a viajar con ella.

Así, según explica su consejero delegado, Michael O’Leary, en unas declaraciones recogidas por “The Irish Times”, parece que la compañía podría considerar de cara al año próximo la eliminación de algunas prácticas que aplican rígidamente a los pasajeros, sin tomar en cuenta ninguna otra consideración, como ocurre en los casos en el equipaje del cliente excede unos pocos milímetros del permitido por las políticas de la empresa.

Viajeros enojados


Esto, ha reconocido, produce la exasperación de los viajeros, que se ven obligados a pagar recargos, a veces de un importe elevado, por mínimas diferencias con las normas establecidas en las políticas que mantiene en su contrato de transporte.




Estas y otras incomodidades añadidas que sufren los pasajeros de la compañía irlandesa y que, según ha reconocido el directivo, su eliminación produciría un mínimo costo para la aerolínea, podrían estar socavando las ventas de billetes.

El deterioro en los resultados de la aerolínea podría además incrementarse en el futuro, haciendo que cada vez un mayor número de viajeros decidan volar con alguno de sus competidores, ya que las diferencias de precio con estos se van reduciendo, lo que disminuye el aliciente que los pasajeros encuentran para viajar con esta compañía.

Rigidez y desatención


Con diferencias de precios muy acusadas, los viajeros quizá aceptaban prácticas abusivas como denegaciones de embarque por sobreventa sin compensación al respecto, retrasos en sus vuelos por motivos diversos sin ser informados ni dispensarles de la atención debida, y otras se similar tenor; pero ahora cuando la competencia de la aerolínea irlandesa ofrece algunos de sus destinos a precios similares o a veces inferiores, con aplicación de políticas menos restrictivas, el pasajero empieza a considerar seriamente estas opciones, descartando los vuelos que ofrece la aerolínea irlandesa.

Además, como es ampliamente conocido, los pasajeros frustrados que habían sufrido una mala experiencia en sus viajes con Ryanair volcaban toda su desesperación en las redes sociales, recomendando enfáticamente a sus seguidores y amigos que no hicieran uso de los servicios de la operadora capitaneada por Michael O’Leary.

Esto ha ido generando lenta, pero inexorablemente, una mala reputación para la compañía, y aunque la publicidad añadida y gratuita que generaba la controversia parecía incrementar el caudal de viajeros de la aerolínea, finalmente parece ser que ha llegado el punto de inflexión, al aumentar el número de pasajeros que considera otras opciones, también de bajo o moderado precio, para llegar a sus destinos, en detrimento de Ryanair.

Este cambio de tendencia parece que comienza a influir de forma significativa en donde la compañía aérea es más sensible y siempre ha centrado toda su atención: en sus resultados económicos.

Un futuro difícil


Debido a estos indicios de futuro nada halagüeños, el directivo puede haber asumido ya la necesidad de recular en su política de trato prepotente hacia los usuarios de su compañía para presentar una cara más amable, flexibilizando la aplicación de sus condiciones de transporte, al menos en aquellos extremos que no supongan una carga económica relevante para la empresa.

 "Ryanair estudia aplicar una mejor comunicación, así como políticas más flexibles que no exasperen a sus pasajeros."

Ahora, el responsable de la compañía parece sentir ya la impotencia de no poder hacer crecer, o al menos mantener, los buenos resultados económicos que Ryanair necesita, muy similar, sin duda, a la que debieron experimentar los pasajeros que quedaron sentados junto a su equipaje cuando se cerró el embarque de su vuelo y la compañía aérea no les permitió subir a bordo, dándoles la espalda.

Según parece, el directivo ha reconocido que la actitud soberbia y el trato prepotente y machista no es aceptable hoy en día en ningún caso, cosa por demás evidente, ya que ello hace indignos a las personas y empresas que lo aplican, máxime si se trata de pasajeros que, por lo general, poco o nada pueden hacer para defenderse eficazmente ante quien tiene un poder y unos medios desproporcionadamente superiores a los suyos.

Políticas orientadas al pasajero


Por eso, pueden darse por bienvenidas las declaraciones en el sentido de reconocer que algunos extremos de las políticas que aplica la compañía no son adecuadas ni aceptables actualmente; el reconocimiento del error por parte del señor O’Leary le honra como persona, pero solo si, en efecto, van seguidas de las acciones correctoras que son de esperar.

De ser así, nos encontramos ante una buena noticia, sobre todo para quienes viajan habitualmente con la aerolínea irlandesa, ya que tanto los pasajeros como la compañía aérea pueden resultar beneficiados con la simple medida de hacer más fácil y flexible la comunicación e interacción entre ambos.

Supuesto esto, solo cabe esperar para ver el resultado.

viernes, 20 de septiembre de 2013

¿Comprar vuelos baratos? ¡Pero si es muy sencillo!

La tecnología actual, los ordenadores y dispositivos móviles conectados a Internet, nos facilitan mucho el proceso de reservar nuestros vuelos, pero la cuestión, para algunos, no es solo si podemos comprar con comodidad, sino si podemos además lograr el mejor precio.

Por medio de nuestro ordenador o de estos dispositivos podemos acceder de forma inmediata a los sitios web de las agencias de viajes digitales o a las propias páginas de las compañías aéreas, donde, en cuestión de minutos, podemos completar la operación.

También podemos usar los motores de búsqueda de vuelos, llamados a veces comparadores de precios, ya que comparan los precios de varios proveedores facilitando la tarea de la elección del vuelo del viajero al mejor precio de ese momento.

Quizá ya te hayas dado cuenta que cada vez las operaciones parecen más sencillas, los precios más baratos, y la retórica propia de la mercadotecnia de los vendedores da la impresión de que hay que actuar inmediatamente, comprar en ese momento, aprovechar la oportunidad, la promoción o el descuento, que es, aparentemente, único y excepcional.

Si tu vuelo es de corta distancia y muy bajo precio, quizá la comodidad y rapidez pueda compensar el posible ahorro que pudieras conseguir mediante una búsqueda más eficaz, pero ¿qué ocurre si se trata de un vuelo de larga distancia y elevado precio?




Hace unos días, un seguidor de Twitter, me envió un mensaje indicándome que iba a reservar un vuelo a un destino americano y me preguntaba por un precio que había obtenido, y que, según le parecía, era bueno, “ya que incluía un descuento del 20 por ciento”, por lo que había pensado comprar su billete lo antes posible.


Sin embargo, precisamente por esta facilidad de obtener la información, unido a una comercialización agresiva de los vendedores, y a la imagen de las propias marcas, es fácil caer en el convencimiento de que un precio es una magnifica oportunidad que hay que aprovechar inmediatamente.

En el caso de este amigo tuitero, resultó, finalmente, que disponía de otras dos opciones que no había contemplado: una casi un 50 por ciento más barata, aunque es cierto que la duración del vuelo era mayor, y otra que era cerca del 20 por ciento más económica, con unas condiciones de vuelo completamente equivalentes.

Ninguna de estas dos últimas propuestas decían incluir promoción ni descuento alguno, pero, sin embargo, eran opciones mucho más económicas para el mismo vuelo, y una de ellas similar en calidad y servicio a la que había descubierto nuestro amigo social.

Es cierto que reservar el vuelo que buscas suele resultar muy fácil, pero comprarlo a buen precio puede ser algo realmente difícil si te guías solo de las informaciones que te muestran los proveedores del servicio.

¡Mala señal!


Estas son algunas señales de que puedes estar a punto de pagar más de lo necesario:
1. Al empezar a reservar no tienes idea de cuál puede ser un buen precio para las fechas y la ruta en que vas a viajar.

2. Crees que por aprovechar “una oferta especial” que finaliza en unos días ya estás comprando al mejor precio.

3. Empiezas por comprobar que el precio de tu vuelo es parecido al que has pagado en ocasiones anteriores.

4. Estás mirando en el sitio web de la aerolínea que te ha dicho un amigo que tiene precios baratos.

5. Has comenzado a buscar en la web de la compañía aérea con la que has viajado en ocasiones anteriores.

6. Estás seguro de que al comprar en una aerolínea de bajo coste ya estás haciéndolo al precio más bajo.

7. No has mirado si hay vuelos en todas las fechas y horarios que pueden convenirte para viajar.

8. No tienes idea del momento adecuado para comprar tu vuelo al mejor precio posible, y no sabes qué hacer al respecto.

9. No has hecho un seguimiento periódico del precio de tu vuelo durante al menos un mes, ni has averiguado previamente cuáles pueden ser los precios de referencia.

10. Estás convencido de que usando un comparador de precios que comprueba estos en más de 100 sitios web ya estás obteniendo la mejor tarifa posible.

Ventajas e inconvenientes


Si ves que algunos de estos puntos anteriores son consistentes con la manera de reservar tu vuelo, eres un buen cliente de las compañías aéreas, ya que posiblemente les compres los asientos más caros dentro de tu clase, que, obviamente, son los que esperan vender en la mayor cantidad posible.[cita "Comprar vuelos baratos es difícil si te guías solo de las informaciones de los proveedores del servicio."]En este caso piensa, aplicando tu sentido del humor, que, aunque estás expuesto a pagar más de que sería posible, o bien a obtener una experiencia de vuelo más pobre de la que estaría a tu alcance al mismo precio, gracias a ello, las aerolíneas pueden seguir prestando sus servicios y otros pasajeros pueden viajar en tu vuelo a un precio menor.

La ventaja: Puedes comprar con solo un par de clics de tu dispositivo móvil, sin preocuparte de nada más.

La desventaja: En vuelos de precios elevados (más de 500 euros, por ejemplo) puedes pagar hasta unos cientos de euros de más.

Si no te has visto reflejado en ninguna de estas situaciones, tus posibilidades de encontrar el vuelo que buscas al mejor precio posible son bastante buenas, y, aunque tendrás que trabajar más la compra, podrás pagar mucho menos por tu vuelo, ahorrando un dinero que puedes emplear para otros aspectos de tu viaje que te interesen más.

La ventaja: El ahorro que consigues y la satisfacción de ser un comprador eficaz.

La desventaja: El tiempo que habrás empleado en hacer tu reserva, y, que si eres una persona muy ocupada, tal vez podrías haber empleado en otras actividades que te resulten más interesantes.

Así, pues, ¿comprar vuelos baratos es muy sencillo? Quizá sí. O... ¡quizá no!

lunes, 2 de septiembre de 2013

10 recomendaciones para superar el miedo a volar

Muchas personas tienen temor a embarcarse en un avión por la sensación desagradable que experimentan al volar, ya que desplazarse por el aire no es una experiencia natural para los humanos y el organismo puede reaccionar como si estuviera ante una situación de peligro.

Naturalmente, no todas las personas experimentan el mismo tipo de miedos y sensaciones desagradables al volar, por lo que las soluciones a este problema pueden requerir diferentes tratamientos.

En algunos casos puede sentirse un miedo intenso e invencible al hecho de entrar en el avión para disponerse a iniciar un vuelo, lo que genera elevados niveles de angustia y ansiedad, que pueden requerir la intervención de un especialista para efectuar una desensibilización progresiva que permita vencer ese miedo irracional a volar.

Pero, con excepción de estos casos extremos que necesitan de tratamiento especializado, la mayoría de las personas que experimentan miedo a volar pueden vencerlo por sí mismas, poniendo en práctica una serie de actuaciones para convertir su vuelo en una experiencia placentera.

Como sabes, en ocasiones, el miedo surge por los pensamientos de los afectados al recrear recuerdos de accidentes mortales que, por ejemplo, han visto en la televisión o incluso en el cine, como elementos de ficción.




También puede surgir temor al sentirse uno vulnerable y sin control para actuar, mientras se viaja desplazándose a esa altura del suelo.

Muchas veces el temor nace por el desconocimiento de la tecnología del funcionamiento de la aeronave, lo que puede producir alarma y sensación de angustia ante cualquier cambio o ruido que se observe durante el vuelo, todo ello debido a que se tiene focalizada la atención en el desarrollo del mismo.

Otra causa de temor, que afecta a algunos pasajeros, es la preocupación sobre si el piloto o los sistema de ayuda en tierra cometerán algún error que desencadene una tragedia, lo que alimenta elevados niveles de ansiedad en las personas que mantienen activos estos pensamientos en el curso del viaje.

Si eres de esas personas a las que inquieta el hecho de volar, he aquí algunas recomendaciones que te ayudarán a mejorar la situación y la experiencia de tu vuelo.

1. Relajación


Trata de relajarte y no mirar por la ventanilla del avión si observas que ello aumenta el nivel de ansiedad que experimentas al hacerlo.

Mira a las personas, al personal auxiliar del vuelo o a puntos fijos de la cabina de la aeronave.

Respira profundamente, practica la respiración abdominal y pon en marcha algunas técnicas para la relajación.

Conversa con tu acompañante o con el compañero de al lado y centra la atención en la conversación mantenida, no en el desarrollo del vuelo, dando por supuesto que del mismo ya se ocupan los pilotos.

2. Positividad


Desarrolla pensamientos positivos hacia la tripulación del avión, considerando que los pilotos son profesionales muy cualificados y están perfectamente formados para desarrollar su trabajo, ya que, de hecho, lo hacen todos los días sin ningún tipo de contratiempos.

3. Seguridad


Piensa que el avión es un medio de transporte muy seguro, muchísimo más que si viajas por carretera, por ejemplo.

 "No centres la atención en el desarrollo del vuelo: da por supuesto que del mismo ya se ocupan los pilotos."

Considera que la aeronave dispone de potentes tecnologías que refuerzan la seguridad con las que no cuentan otros medios de transporte.

Ten en cuenta que la preparación de un piloto para manejar un avión en las vías aéreas, mucho más descongestionadas de tráfico que las autopistas, es muchísimo mayor que la de un conductor normal de los que comúnmente te encuentras en la carretera cuando vas cada día al trabajo, por ejemplo.

4. Tranquilidad


Si observas algún detalle en el curso del vuelo que te causa temor, consúltalo con los auxiliares de la cabina de pasajeros: ellos te darán la información que necesitas para tranquilizarte y ver que es algo normal en el desarrollo del mismo.

5. Compañía


5. Si puedes viajar acompañado, hazlo: esto te resultará de ayuda al poder conversar de forma más directa y distendida que con un vecino de asiento casual a quien no conoces.

6. Entretenimiento


Lleva revistas o libros para leer durante el vuelo, haz uso del sistema de entretenimiento del avión o ve películas si se trata de vuelos de medio o largo recorrido, o bien escucha música relajante, ya que ello te impedirá focalizar tu atención en los ruidos o movimientos que efectúa el avión en el normal desarrollo de la travesía.

7. Relajación


Usa ropa cómoda para viajar que te ayude a sentirte relajado y procura pensar en los detalles agradables de tu viaje; por ejemplo, si efectúas un vuelo por turismo ve pensando en todo lo que te espera a tu llegada a destino: el hotel, las excursiones, las visitas que has programado, etc.

8. Confianza


Si el vuelo atraviesa una zona de turbulencias pueden esperarse movimientos del avión, pero piensa que, aunque quizá experimentes sensaciones desagradables, ello no implica en absoluto que el nivel de seguridad haya disminuido y sea menor.

"No conviene tomar bebidas excitantes antes del vuelo, tales como el café o el té, pero quizá te sea de ayuda tomar alguna infusión de hierbas relajantes."

Ten en cuenta que durante una tormenta el avión puede efectuar movimientos en sentido antigravitatorio al atravesar masas de aire con diferentes presiones, y entonces puedes sentir una falta de sustentación al disminuir la sensación de peso de tu cuerpo, o bien, si el movimiento es gravitatorio, la sensación será en el sentido de aumentar tu peso corporal, todo lo cual suele generar ansiedad.

Si esto ocurre, piensa que es un proceso absolutamente normal, aunque desagradable, que generalmente te afectará a la zona abdominal de tu cuerpo, ya que las vísceras flotan en el abdomen y estos movimientos hacen que se desplacen hacia arriba y hacia abajo y choquen contra el diafragma.

Debes tener el cinturón de seguridad debidamente abrochado, al menos hasta que la turbulencia haya pasado, y no levantarte del asiento, permaneciendo tranquilo y desechando cualquier pensamiento negativo en relación con la seguridad del avión.

9. Bebidas


En general, no conviene tomar bebidas excitantes antes del vuelo, tales como el café o el té, pero quizá te sea de ayuda tomar alguna infusión de hierbas relajantes para sentirte más tranquilo.

10. Buen humor


Durante el vuelo, se positivo, bromea con las personas que te acompañen en tu viaje o con los compañeros de al lado si son receptivos a la conversación, y sontén una charla sobre temas que te interesen y que te mantengan ocupado.

Si el vuelo es nocturno y de larga duración, generalmente la gente suele dormir, por lo que encontrarás una buena ocasión para relajarte y descansar.

Además, mientras duermes en esa parte del tiempo de tu vuelo, no tendrás ocasión de pensar en tus miedos y te sentirás mucho más descansado y activo cuando llegues a tu destino.

Saber cuándo reservar tu vuelo puede ayudarte a ahorrar dinero

Cuando nos disponemos a viajar, y necesitamos usar la vía aérea para llegar al lugar de nuestro destino, la primera cosa que nos viene a la mente es la de saber cómo deberemos efectuar la reserva para que nuestro vuelo nos ofrezca un buen servicio al menor precio posible.

No sé si será tu caso, pero muchos viajeros, a la hora de comprar su billete de avión, se preguntan qué proveedor o agencia de viajes lo ofrecerá más barato.

De hecho, suele ser habitual que antes de comprarlo, la mayoría de los viajeros busque precios en varios sitios web de agencias o aerolíneas, e incluso en algunos comparadores de vuelos, tratando de encontrar el mejor precio posible.

Tal vez sabes ya que este procedimiento es interesante y puede permitirte ahorrar algún dinero, pero, en general, por efecto de la competencia, salvo alguna excepción, las diferencias de precio entre la mayoría de vendedores solventes (aerolíneas o intermediarios) son escasas, siempre, naturalmente, que se estén refiriendo al mismo vuelo.

Es un sistema bastante bueno para descubrir distintos productos y opciones, pero aun así no significa que los precios más baratos que nos ofrezcan en un momento determinado sean definitivos, ni que en un tiempo posterior no puedas obtener otros mucho mejores, ya sea para el mismo vuelo o para otras opciones que te interesen.

Llegados a este punto, parece que cabría preguntarse: ¿cuándo es el mejor momento para comprar un billete para viajar en una fecha determinada?

Con frecuencia, si aciertas a comprarlo en el momento adecuado, el ahorro puede ser muy importante: por ejemplo, un vuelo intercontinental de 1.200 euros podrías conseguirlo por tan solo 650.

¿Es fácil saber cuándo hay que comprar un vuelo para obtener un ahorro importante? ¿Cuál es el procedimiento a seguir para comprar vuelos realmente baratos? ¿Podemos reservar siempre estos vuelos baratos? ¿Alguna herramienta puede ayudarnos a localizar y comprar un vuelo barato?

Posibilidades actuales al alcance del viajero


Desde luego que no es fácil contestar a todas estas preguntas, antes al contrario, a pesar de la gran cantidad de sitios web de operadores que venden billetes de avión, y de la proliferación masiva de motores de búsqueda comparadores de precios ofrecidos por agencias, aerolíneas e intermediarios diversos, obtener un vuelo barato es una operación difícil que requiere del conocimiento y experiencia del comprador.

Es cierto que la tecnología ha mejorado, posibilitando a veces que el viajero se convierta en su propio agente de viajes, configurando el vuelo que necesite a su medida ayudado por los filtros y otras herramientas que incorporan estos sitios, que, además, le permiten añadir a su pedido servicios complementarios que pudiera necesitar, como es el caso de hotel o alquiler de vehículo para desplazarse en su destino.

Indagando sobre los precios


Si tomamos como punto de partida los resultados de búsqueda de los comparadores de precios que consultan en gran cantidad de vendedores para ofrecernos los mejores precios de cada uno de ellos, estos sistemas pueden ser considerados una ayuda en forma de ahorro de tiempo, en comparación con el manejo manual de los datos independientes de cada uno de los proveedores.

 "Planeando  tu vuelo con tiempo mejoras la probabilidad de comprar los billetes de avión cuando su precio sea más barato."

Además, la compra en el vendedor recomendado no suele suponer ningún encarecimiento en el vuelo: este deberá tener el mismo precio que si hubiéramos ido directamente al sitio web del vendedor.

De este modo, usando estos recursos razonablemente, e invirtiendo un tiempo en las búsquedas, es posible llegar a conseguir un buen precio para un vuelo en un momento determinado.

El mejor momento para comprar


Sin embargo, se dan ocasiones en las que conseguir un vuelo barato no depende de dónde compres los billetes, sino de cuándo efectúes la reserva.

Desde luego, si no planeas el viaje con tiempo y necesitas reservar el vuelo de forma inmediata, se esfuma casi por completo la posibilidad de obtenerlo a buen precio, excepto que esté presente la casualidad de que en el momento de la compra te encuentres con alguna oferta de última hora, cosa bastante improbable, aunque a veces puede suceder.

Por eso, previendo anticipadamente tu vuelo, aumentas de forma significativa la probabilidad de comprar los billetes de avión cuando su precio sea uno de los mejores.

Aun así, a veces seguirá siendo una tarea laboriosa, ya que, como acaso hayas observado, los precios suelen tener la mala costumbre de variar constantemente.

Precios que suben y bajan


Algunos piensan que el precio es siempre el mismo para un determinado trayecto, o que, a lo sumo, varía en función del precio del combustible o de la proximidad de la salida del vuelo.

Desde luego que estos elementos pueden influir, pero las variaciones del precio dependen también de otros muchos factores.

Ten en cuenta que las compañías aéreas invierten gran cantidad de recursos en el software de gestión de rendimiento de los vuelos, cuya principal misión no es otra que maximizar el precio de cada pasaje, en un esfuerzo para vender toda su producción y aumentar los ingresos.




De este modo, podemos observar que si se efectúan comprobaciones en el buscador de una aerolínea o agencia de viajes cada varios días, es posible encontrar, en sucesivas ocasiones, precios diferentes para el mismo vuelo, con notables diferencias entre cada uno de ellos, llegando incluso a más del cincuenta por ciento del precio del billete.

En una observación real de un vuelo efectuada manualmente en un día determinado se obtuvieron estos resultados: a las 00:33 horas, 178,78 euros; a las 08:22 horas, 176,20 euros, a las 14:54 horas, 59,10 euros; y a las 20:17 horas, 176,20 euros.

Así, pudo darse el caso de compradores al precio de 59,10 euros que viajaron en el mismo avión, sentados quizá al lado, de quienes pagaron 178,78 euros por su vuelo.

Los programas informáticos de las compañías aéreas pueden analizar a cada momento el número de plazas vendidas en cada vuelo, la tendencia histórica de ocupación del mismo, los precios de venta de sus competidores para ese trayecto, la cuota temporal de mercado, los viajeros de última hora (negocios y urgencias), las fechas del calendario (vacaciones, días cómodos para idas o retornos) y otros muchos parámetros más para determinar, en un momento dado, cual debe ser el precio de cada asiento.

En ocasiones, esto puede cambiar incluso varias veces al día, ya que si los precios del pasaje son altos, los viajeros pueden quedarse en casa o volar con la competencia, y si son bajos el vuelo resultará poco rentable o deficitario.

Muchos de los precios muy baratos pueden estar disponibles a veces solo unas pocas horas al día, bien sea para probar el efecto de esta estrategia en la ocupación del vuelo, bien para neutralizar los efectos de precios bajos en la competencia, o simplemente por otras diversas razones.

¿Cómo conseguir estos vuelos?


Para tener una posibilidad razonable de obtener precios bajos conviene seguir frecuentemente la evolución de estos y saber distinguir perfectamente entre lo que es un buen precio y lo que no lo es.

 "Los precios de los vuelos más baratos pueden estar disponibles a veces durante cortos periodos de tiempo."

Realmente, lo primero que necesitas saber es cuál será un precio interesante para el vuelo que buscas, para lo cual es necesario conocer a qué precios se está vendiendo habitualmente tu vuelo.

Es decir, que no es tanto saber a qué precios se está vendiendo en un momento determinado (solo de utilidad si se va a comprar ya), sino a qué precios se ha vendido en los últimos meses, por ejemplo, ya que si actuamos con previsión y antelación, esto nos da pistas sobre cuál será el mejor momento para reservar, a la vista de un precio determinado.

Sabiendo cuál es un buen precio para nuestro vuelo podremos identificar mejor las ofertas que nos presentan los vendedores, pero saber cuándo aparecerán y cuánto durarán activas, seguirá siendo difícil si no prestamos mucha atención a la evolución del precio.

Ayudas para seguir los precios


Un sistema de alertas para obtener información de la evolución del precio del vuelo que te interese puede ser una ayuda más eficaz, especialmente si permaneces atentos a la alerta y puedes aprovechar la oferta durante el tiempo que esta podría permanecer activa.

Pero incluso si no llegas a tiempo de aprovechar una buena oferta, el conocimiento del precio más barato al que realmente puede venderse el vuelo que buscas, puede hacerte aprovechar una segunda oportunidad con un precio también bajo, especialmente si aún falta tiempo para la salida del vuelo y puedes esperar.

Con estos conocimientos es posible entender mejor cuándo los resultados de tu búsqueda arrojan un precio interesante que te conviene aprovechar, reservando en ese momento, y cuándo, por el contrario, los precios nos son realmente buenos, siendo más adecuado continuar con la observaciones.

A pesar de los recursos disponible en los sitios web, determinar el momento conveniente para comprar no es cosa fácil, pero si lo consigues cuando reservas un vuelo de media o larga distancia, cuyos precios son más elevados, el ahorro en juego puede ser muy importante.
Destinos: