Dentro de la línea seguida por la mayoría de las compañías aéreas en sus esfuerzos por superar la crisis económica y mejorar sus beneficios, la aerolínea American Airlines ha comenzado a cobrar más por los asientos que se encuentran situados cerca de las puertas de salida de la aeronave y que incluyen los asientos frente a los tabiques divisorios.
Este nuevo suplemento se ha situado entre los 19 y los 39 dólares (unos 15 a 30 euros), dependiendo del tipo de aeronave y del vuelo: así en vuelos de mayor recorrido se cobra un mayor importe.
Por ejemplo, el vuelo a Nueva York desde los Ángeles incurre en un suplemento de 30 euros, debido a la distancia que separa a ambas ciudades norteamericanas.
Según ha explicado la aerolínea con sede en Texas en un comunicado a los medios, difundido este miércoles, estos asientos facilitan la acción de abordar o abandonar la aeronave más pronto que el resto de los pasajeros que ocupan la cabina de clase económica.
Estas plazas se han denominado “asientos expresos”, por la facilidad que tiene el pasajero para ocuparlos o abandonarlos a llegar o salir de la aeronave.
American Airlines dijo que los “asientos expresos” incluirán también cabeceras más cómodas para el usuario y estarán ubicados en las dos o tres primeras filas de la cabina principal, dependiendo del tamaño de la aeronave.
Actualmente ya hay compañías aéreas como Continental Airlines, Frontier, United Airlines, US Airways, AirTran, JetBlue y otras, que disponen también de asientos por los se cobra un suplemento al pasajero.
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