lunes, 19 de marzo de 2012

Formas de evitar los precios caros de las aerolíneas de bajo costo

Las compañías de bajo coste, de las que su mejor exponente en Europa es Ryanair, primera en cuanto al tráfico de pasajeros que maneja en el continente, suelen presentar todas sus actuaciones como encaminadas a lograr ahorros de costos para ofrecer una tarifa más baja al pasajero.

Ryanair, por ejemplo, si abre una nueva ruta suele celebrarlo con una oferta de vuelos a 9,99 euros, que parece dar a entender que se podrán conseguir billetes a este precio a muchos destinos, ajustados a las fechas de viaje del pasajero.

Esto en realidad no es así, o al menos no en muchas ocasiones, y lo que realmente significa es que para algunas fechas de ida y regreso al destino ofertados pueden, con suerte, encontrarse estos precios –eufemísticamente hablando, haber disponibilidad–, entendiendo siempre que se trata de precios para un trayecto (ida), aunque casi siempre comprando un vuelo de ida y vuelta.

Críticas en las redes sociales


En Twitter, por ejemplo, la compañía irlandesa de bajo coste capitaliza un volumen de críticas impresionante, pero en su mayoría proveniente de pasajeros de la línea aérea que manifiestan su intención de seguir usando sus servicios debido al convencimiento de sus bajos precios.

Raramente, suelen mostrar satisfacción sin crítica o sátira hacia sus servicios, aunque algunos usuarios aceptan abiertamente estas limitaciones con tal de poder viajar a precios reducidos.

http://twitter.com/#!/javiveiro/status/177088527547367424

Sin embargo, Santiago, desde Madrid, me ha enviado un email, preguntándome que está haciendo mal para no conseguir un vuelo a bajo precio para él y su novia que tienen intención de visitar Londres durante las vacaciones de Semana Santa, saliendo de Madrid, según me indica, el sábado 31 de marzo a primera hora y regresando a última hora del domingo 8 de abril.

“Yo pensaba que podría encontrar algo para esas fechas por menos de 100 euros por cada uno y resulta que no hay nada por menos de 300 o 400 euros”, señala.



“En Ryanair están casi a 370 euros y en easyJet tienen un anuncio para Londres Gatwick en abril por 33,99 euros, y luego voy a reservar el vuelo que necesito y cuesta 360,59 euros. ¿Qué es, una burla?”.

Demanda y precios


Los precios de los vuelos tanto en las compañías de bajo costo como en las tradicionales están sujetos a variaciones por muchas causas, entre ellas, la relación entre la oferta y la demanda, es decir que si el pasajero necesita un billete para unas fechas de viaje en que la ocupación del vuelo es muy baja, tendrá más posibilidades de encontrarlo a buen precio que cuando todo el mundo viaje por coincidir con fechas y horarios muy solicitados.

Es decir, que los precios de las aerolíneas de bajo coste no son siempre bajos, sino que en algunas ocasiones serán también caros o muy caros, con referencia al conjunto de precios para una ruta determinada.

Si Santiago, en lugar de iniciar su viaje a primera hora de la mañana del sábado y terminarlo regresando a Madrid a última hora del domingo, lo hiciera a última hora del sábado y a primera del domingo, probablemente ya se podría ahorrar hasta la mitad del precio que indica.

La importancia de las fechas


Y, por supuesto, no viajando en esas fechas de máxima afluencia vacacional, podrá efectuar su vuelo de ida y vuelta por menos de los 100 euros que se había fijado como referencia.

Viajar en las fechas y horarios de comienzo o conclusión de periodos vacacionales tiene un elevado costo, no solo en el precio del billete porque las aerolíneas ya conocen de antemano estas preferencias y fijan precios más altos, que fácilmente puede cuadruplicar la tarifa media, sino también en calidad de servicio, y más tratándose de aerolíneas de bajo coste.

Viajar a más bajo precio


Para no pagar más de lo que sería normal conviene hacer varias cosas:

       
  • Prever el viaje con la debida anticipación e ir haciendo un seguimiento de los precios; normalmente, empezar a ver con tres o cuatro meses de antelación es suficiente.


       
  • Tratar de evitar que el viaje coincida con las fechas y horas punta de salida o regreso en el periodo vacacional, y si ello no es posible comparar entre las diferentes aerolíneas y opciones para ver cual es la más conveniente.


       
  • Comparar los precios de diversas compañías en varias fechas posibles ya que no siempre los mejores precios se encuentran en la aerolínea de bajo coste más conocida, ya que a veces hay opciones con otras aerolíneas que pueden ser de mayor interés.


       
  • Según al destino al que se viaje considerar un vuelo en conexión puede alargar algo el tiempo del viaje, pero puede rebajar considerablemente el precio del mismo.

Viajando a destinos europeos, Vueling, Ryanair, easyJet, Wizz Air y algunas otras pueden tener precios bajos en muchas ocasiones, pero también altos costos por la facturación del equipaje, por lo que según los casos unas u otras pueden resultar más interesantes.

Hay veces que si se viaja con bastante equipaje, una aerolínea tradicional puede ofrecer un mejor precio que una de bajo coste, para evitar que nos suceda algo parecido a lo que nos cuenta en Twitter Alvaro Domínguez.

http://twitter.com/#!/DominguezAlvaro/status/175978581074259968

La temporada de verano es mucho más cara para viajar que los finales de la primavera, por ejemplo, donde se puede obtener un mejor servicio, tanto durante el vuelo como en el destino, aparte del menor precio de los vuelos.

Huir de la masificación de los periodos vacacionales, si ello es posible, es una buena idea que permite disfrutar más del viaje, ahorra dinero y que cada vez intentan poner en práctica un mayor número de personas.

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