El intento de atentado contra el avión de Delta Airlines de ayer viernes está produciendo las primeras medidas y restricciones impuestas por la Administración de Seguridad del Transporte de los Estados Unidos para garantizar la seguridad de los vuelos.
La nueva normativa al respecto implica, entre otras restricciones, que durante la última hora de vuelo que comprende la fase final de descenso y aterrizaje del avión, los pasajeros tendrán que permanecer sentados en sus asientos, sin posibilidad de tener acceso ni a sus equipajes de mano, ni a otros enseres personales u objetos de ninguna clase.
Algunas aerolíneas, en cumplimiento de las nuevas normas, ya han habilitado en sus sitios web, información al pasajero que viaje a Estados Unidos, para prevenir los inconvenientes que podrían producirse en los puestos de control de pasajeros.
En general, se recomienda que los pasajeros acudan al aeropuerto con la mayor anticipación posible para disponer de más tiempo ya que los controles serán más largos y minuciosos.
También se advierte que los pasajeros pueden esperar un mayor número de retrasos en los vuelos y pérdidas de conexiones, así como cancelaciones de algunos vuelos.
En algunos casos se advierte que sólo se podrá llevar una única pieza como equipaje de mano, mientras que en el equipaje a facturar no habrá restricciones.
Según esta nueva normativa el pasajero será objeto de una revisión minuciosa, así como su equipaje de mano, tanto en los controles habituales del aeropuerto como en la propia puerta de embarque al avión.
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