La Administracion Federal de Aviacion (FAA) ha resuelto imponer a American Airlines una multa de unos 19 millones de euros como consecuencia de los fallos detectados en el mantenimiento de los aviones que produjeron la cancelación de unos 3.000 vuelos, afectando a cerca de 300.000 pasajeros en 2008.
El organismo estadounidense ha dado a conocer que la aerolínea no tomó las medidas que correspondían para evitar el deterioro y corrosión de los cables de alimentación de la bomba hidráulica de emergencia del tren de aterrizaje, que podrían producir pérdida del control hidráulico o incendios por cortocircuito de los cables, en sus aviones McDonnell Douglas MD-80.
En 2006, la FAA ordenó a la aerolínea que llevase a cabo la revisión de sus aviones para evitar estos problemas, pero American Airlines, según la FAA, no realizó correctamente este servicio de mantenimiento.
La aerolínea emitió un comunicado este jueves en el que explica que cree que esta actuación de la FAA es injustificada, en unos hechos que ocurrieron hace ya más de dos años.
La FAA ha señalado por medio de un comunicado de prensa que la aerolínea ha ido obteniendo progresos en la mejora del mantenimiento de las aeronaves.
Si la multa llegara finalmente a ser efectiva se trataría de la mayor sanción en la historia de la FAA, el organismo regulador del sector en Estados Unidos.
Ahora, American Airlines cuenta con 30 días para efectuar alegaciones a la FAA.
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