Un avión Boeing 757 de American Airlines que se encontraba efectuando un vuelo desde Miami a Boston, sufrió un incidente al abrirse un agujero en la estructura de la nave, lo que obligó al piloto a regresar de inmediato al aeropuerto de origen, según se ha informado en diversos medios locales estadounidenses, citando a un portavoz de la FAA.
El percance tuvo lugar el pasado martes, si bien ha sido dado a conocer este fin de semana, y sobrevino al producirse un agujero de unos 30 por 30 centímetros en las proximidades de la puerta delantera izquierda de la aeronave, cuando volaba a más de 9.000 metros de altura.
El aterrizaje de emergencia, de vuelta al aeropuerto internacional de Miami, se produjo con total normalidad y ninguno de sus 154 pasajeros y 6 miembros de la tripulación resultó herido, según dio a conocer la aerolínea en un escueto comunicado.
El agujero ocasionó la despresurización de la cabina, por lo que las mascarillas de oxígeno fueron liberadas para que los pasajeros pudieran respirar normalmente en tanto se descendía a niveles de seguridad, siguiendo las instrucciones dadas por el piloto.
Un pasajero relató a los medios que se había escuchado una fuerte explosión en el exterior de la nave, y que inmediatamente se perdió la presión en la cabina y se escuchaba mucho ruido, mientras que otro señaló que se produjeron momentos de pánico y caos durante el rápido descenso del avión.
Las autoridades están investigando ahora cuales fueron la causas por la cuales se abrió el citado agujero en el cuerpo de la aeronave.
Según fuentes de la investigación se cree que pudo ser debido a la fatiga del material, como consecuencia de alguna anomalía.
El avión tenía 20 años de antigüedad, según precisaron las mismas fuentes.
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