Muchos viajeros acostumbran a comprar sus billetes con mucha antelación, por una parte influidos, quizá, por la inseguridad que les da el hecho de tener pendiente este aspecto tan importante para poder disfrutar sin problemas de sus vacaciones.
Otros piensan que comprando con muchos meses de adelanto se consiguen mejores precios, tal vez porque esto es lo que con frecuencia repiten algunos vendedores, pero este es un simple argumento comercial para vender lo antes posible su oferta de plazas, y no tiene relevancia para tu objetivo de comprar vuelos baratos.
Ahora bien, si ya has reservado tu vuelo, no hay razón para preocuparse más por su precio: siempre puedes pensar que has formado parte de la excepción de quienes compraron al mejor precio posible.
Comprar en el momento adecuado
¿No has reservado tu vuelo aún? Entonces hay que ponerse manos a la obra, ya que dejarlo para el último momento disminuye también la probabilidad de encontrar el mejor precio posible.
Es cierto que en momentos de crisis, como el actual, muchas personas posponen su decisión hasta que falta muy poco para la fecha en la que van a viajar: quizá piensan que si la demanda queda por debajo de las expectativas de oferta de los vendedores podrían encontrar algunos precios interesantes.
Sin embargo, ten en cuenta que hasta finales de este mes de mayo es un momento perfectamente adecuado para reservar tu vuelo para viajar en julio o agosto, e incluso en septiembre, si encuentras un buen precio.
Elegir bien la fecha de ida y regreso
Las fechas en las que vas a llevar a cabo el desplazamiento están estrechamente relacionadas con el precio final que pagarás por tu vuelo, ya que si viajas en días en que lo hace la mayoría de las personas, la demanda será muy alta y los precios serán más caros.
Por ejemplo, si vuelas el 1 y 15 de agosto, seguramente pagarás más, o incluso mucho más, dependiendo del origen y destino de tu viaje, que si lo haces el 6 y el 20.
A veces, sin embargo, no tenemos opción porque las fechas impuestas por las vacaciones no tienen flexibilidad, así que en ese caso, hay que aceptar que nuestro vuelo será mucho más caro, además de obtener un servicio probablemente más precario, ya que cuando aumenta la afluencia de viajeros de forma masiva los servicios tienden a degradarse.
Si tienes la suerte de poder elegir las fechas de inicio y final de tus vacaciones, puedes aprovechar esto como una herramienta para ahorrar dinero y obtener mejores servicios, eligiendo para viajar algunos días, como los martes o los miércoles, que suelen ser más baratos que los lunes o los fines de semana.
Comparar precios y opciones
Muchos destinos disponen de una gran cantidad de opciones para viajar, diversos horarios, aerolíneas, escalas, etc., con lo cual puedes elegir aquel que, satisfaciendo tus necesidades, tenga un mejor precio.
Para ello conviene usar un buscador de vuelos, y a partir del precio de referencia que indique, o, en su defecto, de los precios más baratos que muestre, examinar las ofertas de al menos cuatro o cinco vendedores, si es posible que incluyan directamente sitios web de agencias de viajes en línea y compañías aéreas.
Ten en cuenta que a pesar de que algunos buscadores actualmente incluyen el “precio final” que probablemente tengas que pagar por tu vuelo y sus resultados son confiables, la mayoría de ellos presentan el “precio anunciado”, el cual acostumbra a ser siempre más bajo que el real, ya que son meros instrumentos publicitarios al servicio de vendedores, por lo que pueden inducirte al error, muy común, de pensar que estás comprando al mejor precio posible cuando en realidad no es así.
Para no perder tu tiempo enredado en el examen de decenas de precios que finalmente no conducen al objetivo deseado, es recomendable que cuando examines los resultados de buscadores descartes sin más los precios provenientes de los anuncios, enlaces promocionados, patrocinados o destacados, e ignores los resultados mostrados en ventanas de anunciantes que se abren sin que tú lo hayas solicitado al buscador, ya que estas opciones no te conducirán a comprar al mejor precio.
Seguir la evolución del precio
Si es la primera vez que buscas el precio de un vuelo en particular y no tienes referencia anterior sobre cuál puede ser su precio normal en las fechas que te interesan, es aconsejable que no lo compres en ese primer momento, sino que sigas viendo cómo se comporta el precio en los siguientes días.
Así, en fechas posteriores, puedes continuar usando el mismo buscador para hacer el seguimiento, pero es conveniente que siempre examines los resultados de varios vendedores y veas qué cambios en precios y opciones se van produciendo cada día.
Para comprar vuelos baratos no es conveniente empezar examinando precios directamente en los sitios web de algunas de las aerolíneas que creas o sepas que trabajan la ruta que necesitas, ya que eso te impedirá conocer las opciones ofrecidas por la competencia, si la hubiese, por lo que puede conducirte a gastar más por tu vuelo o a reservar a parecido precio un viaje más largo o con más escalas del que hubiera sido posible.
Saber cuándo comprar
Después de unos días viendo el precio que ofrecen los distintos vendedores ya tendrás una idea más o menos aproximada a la realidad de lo que puedes esperar que te cueste tu vuelo, así que podrás tomar mejor la decisión crucial de cuándo comprarlo.
Algunos buscadores ofrecen precios de referencia que pueden servirte como guía para saber si en un momento determinado tu vuelo tiene un precio suficientemente bueno como para reservarlo en el acto.
Si no tienes idea de cuál puede ser un buen precio para tu vuelo, y el buscador que usas no te ofrece referencias, sino solo los vuelos más baratos en ese momento, puedes ver precios en nuestro blog de ofertas diarias o usar el buscador para orientarte sobre los precios reales que se vienen ofreciendo en fechas aproximadas a las de tu vuelo.
La comodidad frente al precio
Cuando vas a comprar los billetes de avión para tu viaje debes tener en cuenta que, desde el mismo momento de iniciar la reserva, cualquier cosa que implique comodidad o rapidez tiene su precio.
Lo ideal sería que simplemente tuvieras que usar una sola vez un buscador, ver cual es la opción que te conviene de entre los resultados más baratos y reservar en ese momento: es lo que hacen muchos compradores, aunque casi siempre pagan más (o mucho más) por su vuelo que quienes trabajan el proceso de compra, comprueban precios y controlan referencias.
Esto, lógicamente, tiene que ser así para que el vendedor obtenga un precio medio que le haga rentable la operación, siéndole irrelevante que quienes compran con rapidez y comodidad sufraguen parte del precio más barato que obtendrán los que usan un método de compra más elaborado.
Pagar implícita o explícitamente por la comodidad no es algo que se produce solo en el proceso de reserva del vuelo sino también en el curso del mismo: selección de asiento, más espacio para las piernas, embarque prioritario, equipajes, etc., ya que todo ello incrementa el precio del vuelo.
Comprar más barato
Comprar tu vuelo a mejor precio que otros pasajeros no es demasiado complicado si se sigue un proceso de búsqueda y reserva adecuado.
Estas son algunas de las cosas que tienes que tener en cuenta si quieres viajar a mejor precio que otros viajeros, incluidos tus compañeros de asiento dentro del avión.
1. Empezar a reservar con tiempo, pero sin adelantarse demasiado
2. No comprar de buenas a primeras, examinar las ofertas
3. Usar referencias, saber cuál puede ser un buen precio
4. Seguir la evolución del precio, comprar en el momento adecuado
5. Evitar días más caros, lunes, fines de semana, periodos festivos
6. Comparar precios y opciones, ver directamente en cuatro o cinco vendedores
7. Dedicar tiempo a buscar, tener paciencia y no precipitarse a comprar
8. No usar servicios complementarios innecesarios, ir ligero de equipaje
9. Considerar horarios más baratos y aeropuertos secundarios
10. Usar vuelos con escalas, los vuelos más largos suelen ser más baratos
Eso sí, por si acaso no preguntes a tu vecino de asiento cuánto le costó el billete de su vuelo. A fin de cuentas la cosa ya no tiene remedio, así que... ¿por qué ibas a querer estropear lo que seguramente será un bonito viaje?
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