jueves, 11 de julio de 2013

Cómo distinguir los vuelos baratos de los que solo lo aparentan

Cada vez que nos disponemos a comprar los billetes de avión para nuestro próximo viaje centramos casi siempre la atención en el precio de los mismos, es decir, en la suma de la tarifa y las tasas, para poder determinar si estamos comprando un vuelo caro o barato.

Sin embargo, este concepto de precio anunciado que aparece en los buscadores y que comprende la tarifa de la compañía y las tasas correspondientes, cada vez tiene una menor relación con el precio real que nos costará el viaje.

Esto es debido a los numerosos cargos extras por los llamados servicios auxiliares que las compañías aéreas venden como complemento para mejorar la calidad del servicio prestado al cliente, y también a la incertidumbre del pasajero sobre si necesitará usar, o tal vez incurrirá inadvertidamente, en algunos de estos pagos adicionales.

La multiplicación de los cargos por comodidades o productos añadidos que mejoran el servicio hace que cada día aumente más el número de pasajeros que, advertida o indeliberadamente, se ven expuestos a pagar más por su vuelo de lo que inicialmente pensaron.

Esto lo demuestra el hecho de que continuamente van aumentando más los ingresos de las aerolíneas por este capítulo en relación con el de las propias tarifas, ocupando ya un puesto relevante en el total de los mismos.



Como sabes, las aerolíneas de bajo coste son las que suelen cobrar más caros estos servicios adicionales; por ejemplo, en España se encuentra en este caso Ryanair, pero también ocurre con otras aerolíneas y en otros países, como es el caso, en Estados Unidos, de Allegiant y Spirit, donde esta última puede llegar a cobrar hasta 100 dólares por transportar el equipaje de mano.

Sin embargo, a la hora de viajar, tienes que tener en cuenta que no todas las aerolíneas, ya sean de bajo coste o tradicionales, cobran lo mismo, ni por transportar el equipaje ni por el resto de los servicios auxiliares que ofrecen, por lo que conviene comparar siempre los cargos que puedan sumarse al precio de tu vuelo para ver cuál es la opción que se ajusta de forma más económica a tus necesidades.

Por ejemplo, si vas a viajar con una maleta en la bodega del avión y otra como equipaje de mano, puede resultarte mucho más barato el viaje con una aerolínea que ofrezca inicialmente un precio aparentemente más caro que con la que presente el precio más barato y aparezca en la primera posición de los comparadores.

"El precio anunciado cada vez tiene una menor relación con el precio real de los vuelos"

Para distinguir entre los vuelos que te resultarán más baratos para tu viaje y aquellos que solo lo aparentan, pero que no lo son, hay que tener claro cuáles serán tus necesidades y qué servicios comprenden los precios que nos presentan cada uno de los vendedores, es decir, las aerolíneas o agencias de viajes, para determinar, finalmente, cuál será la opción más conveniente.

Por eso, para comprar vuelos baratos, hay que considerar siempre la posibilidad de que un vuelo aparentemente más barato pueda convertirse en uno mucho más caro y que te ofrezca una peor experiencia de viaje, es decir: las cosan no siempre son lo que a primera vista parecen.

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